martes, 3 de agosto de 2010


Cuesta volver a empezar. Y no lo digo con un tono existencialista, más bien de que cuando borraste algún dibujo nada es lo suficientemente bueno para parecer mejor que lo anterior.
Es cierto, pusiste alma, corazón y pan, como dijo Gervacio por ahí,y el resultado de un eventual desaliento es extremadamente desalentador. Sacaste la hoja y quedaron las marcas, los lápices siguen iguales pero la sensación de fracaso hace que todos te parezcan feos, sin punta y horrendos.


Escribir por ejemplo ha sido una de mis cruces en estos días de letargo, de limpieza y de desorden.No es sencillo que se te escapen las razones, no es muy fácil saber que no darás con ellas simplemente porque sabes lo que te conviene y prefieres partir en dirección contraria a donde solías encontrarlas. No es fácil revivir el lápiz y el teclado de un día para otro. Rayas, subrayas, escribes, borras; te aburres, cierras y no quieres dar lástima diciendo que es imposible escribir algo al respecto, pero te desespera sobremanera no tener algo que decir.

Pero como dicen por ahí, los círculos se rompen cuando se rompen...

Y aquí me veo balbuceando, intentando, subrayando. Mi genialidad - si es que la tengo - volverá de a poquito, sin prisas y si apuros.

Por mientras puedes seguirme, por mientras entra en mi vida y cuéntame historias que me hagan sonreír. Sé que juntos llegaremos a puerto, y ¿Quién sabe? si mi próximo post haga el honor al resto de los que algún día he publicado, y por supuesto, publicaré en ese futuro que me huele más a presente.

2 comentarios:

Luis Cano Ruiz dijo...

Las vacaciones se inventaron porque es imposible seguir a tope con todo. No es posible que el torrente creativo siga siempre renovado, sin fallos.

En ocasiones se necesita desconectar, dejar de escribir, de pensar en poemas, escritos, historias. Dedicarse a otra cosa.

Y sin quererlo, un día, volverás a tener la necesitad de escribir, y lo harás.

Cuídate.

Kim Bertran Canut dijo...

Si escribes por vocación, por necesidad espiritual, el sufrimiento de pérdida de inspiración, es un proceso del que se puede llegar a crear un buen comienzo de creatividad y cambio de registro...Abrazos cálidos de aliento y fe en las letras...