lunes, 2 de febrero de 2009

Angeles...


Cuentan que cuando aparece un silencio, el tiempo se detiene. El ruido se calla de un momento a otro, y la gente detiene su paso, los ojos se desorbitan para el que no oye, el pecho se aprieta, se enfría y después de un rato, muere inexplicablemente.

Todo por culpa de un ángel, que lanza su flecha, la pone y la quita, se la guarda o se equivoca de corazón.

El juguetea y a todos se nos seca la boca.


Listo, se acabó. El tiempo sigue girando. El mundo avanza y el golpe de oreja aun zumba en la oreja de quien, tumbado en el piso, se quedó sin escuchar por un largo rato más.


-Anímate - le dicen los amigos- El mundo no se terminó.

- ¿Y de qué mundo me hablan?, si todo se quedó callado.


Cuentan que desde ese momento el tiempo pasa a ser distinto. Las horas son siglos, y tres minutos cuentan como un futuro incierto. Dimes, diretes, cartas a escondidas, lágrimas secas y sonrisas que vuelven a hacer escuchar. Y el angelito aquél sigue pasando y paseando, como si todo esto fuera un juego.


Todo es así, hasta que viene otro ángel. Más grande, de esos con alas doradas y timbre de voz definido. Lo toma por las alas, le tira amorosamente las orejas.

-No se debe jugar con ellos - le dice de nuevo - eso lo sabes.


El angelito solloza, ambos se abrazan, todos siguen su camino.


Una sonrisa en la tierra basta, y el mundo vuelve a girar en el sentido que debe. Eso en los casos afortunados. Cuando el silencio se tapa con miradas y consquillas en la panza.

Eso no pasa, cuando el travieso querubín dejó callado al mundo entero, presagiando lo que duele, un final y otro más.



4 comentarios:

Abril_de_otoño dijo...

huu ese traviezo kerubin no???
en varias vidas deja la embarrada,,,,
he sentido solo una vez detenerse ese tiempo y la verdad, solo se detuvo por un momento en mi vida,
creo que desde ahi, le hago el kite a sus flechas....

besos

eme dijo...

Echo de menos las cosquillitas en la tripa...
cuando ese diablillo me disparo creo que erró el flechazo...
un beso gordo

AliaS dijo...

cuanta frescura!

me encantó pasar por aqui.

saludos

Arcángel Mirón dijo...

A veces nos dispara la flecha equivocada.

:)